Más de 300 niños disfrutan de las actividades de la Bibliopiscina en el mes de julio
La Bibliopiscina se ha convertido en una de las actividades estrella de este verano. Y es que sólo en el mes de julio han pasado por ella más de 300 niños que, atraídos por sus actividades, han querido disfrutar de la piscina de una manera diferente. De esta forma la Bibliopiscina ha contado con talleres de manualidades y plastilina, cuentacuentos, diferentes juegos populares como comba, pelota, bolos, el escondite inglés, balón prisionero, balón-cesta, juego de las sillas, juegos en corro, búsqueda de objetos escondidos, bits de inteligencia, así como diversos juegos de mesa entre los que destacan dominó, rompecabezas, puzles y juegos para aprender a sumar y restar, juguetes de construcción, musicales… además del ya tradicional rincón de lectura donde pueden han disfrutado de cuentos, novelas, cómics o revistas.
Las manualidades cambian cada mes. Así, en el mes de julio se realizaron algunas propuestas tan útiles como abanicos de mano, alfombrillas de ratón, barcos y aviones de cartón ondulado, cubos de dibujos, juegos de ‘Tres en raya’, marcapáginas o pulseras de abalorios, mientras que en lo que llevamos de mes, las manualidades se han centrado en elaborar juguetes como marionetas de cuchara, animales o maracas.
Además de estas propuestas otras de las más concurridas han sido las fiestas temáticas, ambas en el mes de julio, que contaron con decoración, merienda, disfraces y muchos premios para los niños.
Cabe recordar que la Bibliopiscina es un servicio municipal gratuito que está dirigido a niños de 3 a 10 años. El servicio cuenta con dos monitoras y se encuentra en funcionamiento desde el 1 de julio y en horario de tarde, de 16.00 a 20.00 horas, de lunes a viernes, en las piscinas municipales de Santa Marta de Tormes.
Como indicó el concejal de Cultura, Francisco Miguel García, ‘la Bibliopiscina es una actividad con la que se ha pretendido crear un espacio acogedor que fomente la cultura a través de la lectura como una alternativa de diversión, y que enseñe que los libros y demás actividades que se van a realizar, son un recurso de ocio más para el tiempo libre’.
En otro orden de cosas, esta propuesta ha pretendido ofrecer un espacio seguro donde poder jugar e interactuar entre niños/as, fomentar el gusto por la lectura, potenciar la participación activa en las actividades propuestas, despertar la imaginación y fantasía de los niños, promover el intercambio social y cultural e introducir al niño/a en el hábito de la lectura, de forma placentera.
Las manualidades cambian cada mes. Así, en el mes de julio se realizaron algunas propuestas tan útiles como abanicos de mano, alfombrillas de ratón, barcos y aviones de cartón ondulado, cubos de dibujos, juegos de ‘Tres en raya’, marcapáginas o pulseras de abalorios, mientras que en lo que llevamos de mes, las manualidades se han centrado en elaborar juguetes como marionetas de cuchara, animales o maracas.
Además de estas propuestas otras de las más concurridas han sido las fiestas temáticas, ambas en el mes de julio, que contaron con decoración, merienda, disfraces y muchos premios para los niños.
Cabe recordar que la Bibliopiscina es un servicio municipal gratuito que está dirigido a niños de 3 a 10 años. El servicio cuenta con dos monitoras y se encuentra en funcionamiento desde el 1 de julio y en horario de tarde, de 16.00 a 20.00 horas, de lunes a viernes, en las piscinas municipales de Santa Marta de Tormes.
Como indicó el concejal de Cultura, Francisco Miguel García, ‘la Bibliopiscina es una actividad con la que se ha pretendido crear un espacio acogedor que fomente la cultura a través de la lectura como una alternativa de diversión, y que enseñe que los libros y demás actividades que se van a realizar, son un recurso de ocio más para el tiempo libre’.
En otro orden de cosas, esta propuesta ha pretendido ofrecer un espacio seguro donde poder jugar e interactuar entre niños/as, fomentar el gusto por la lectura, potenciar la participación activa en las actividades propuestas, despertar la imaginación y fantasía de los niños, promover el intercambio social y cultural e introducir al niño/a en el hábito de la lectura, de forma placentera.