Adhesión a la Red de Ciudades por el Clima
El concejal de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Santa Marta de Tormes, David Mingo, confirmó que la localidad se acaba de adherir a la Red Española de Ciudades por el Clima, una red integrada por municipios españoles y que trabaja por la protección del clima desde sus respectivas competencias y ámbitos territoriales, el desarrollo de políticas coordinadas y el intercambio de experiencias y puesta en marcha de ideas e iniciativas.
Tal y como indicó David Mingo, esta adhesión se realiza con unos objetivos claros, ‘aportar soluciones y medidas que se puedan implantar para frenar el cambio climático y sus efectos, trabajando también en la adaptación y en la promoción de la planificación ambiental estratégica como herramienta para aminorar la emisión de gases de efecto invernadero’.
Esta red centra sus actividades en diversas áreas. Así, desde el punto de vista del transporte, trabaja por elaborar planes de movilidad sostenibles, dirigidos a promover modos de transporte no contaminantes. En aspectos energéticos, desde la red se ejecutan acciones dirigidas a la reducción del consumo de energía final, a la mejora de la eficiencia y a la producción de energía con fuentes renovables. De igual modo se realizan actuaciones encaminadas a la reducción de las necesidades energéticas de los edificios y a la incorporación en ellos de energías renovables además de llevar a cabo propuestas dirigidas a reducir las necesidades de desplazamiento y energía de los ciudadanos, manteniendo ciudades compactas, multifuncionales y eficientes.
En función de estas premisas, la adhesión a esta red supone que en los dos primeros años se realicen actuaciones en varias áreas. Así, tal y como se pide desde la red se han aprobado ya ordenanzas sobre energía solar térmica en nuevas edificaciones y alumbrado público; se aplicarán medidas económicas y fiscales para favorecer la implantación de energías renovables y medios de transporte urbano menos contaminantes; se incluirán criterios de eficiencia energética en los concursos de compra de bienes y adjudicación de servicios municipales; se incorporarán de forma progresiva sistemas de eficiencia energética –la Concejalía ya ha elaborado el pliego energético y existe una adjudicación a una empresa- y energías renovables en los edificios y dependencias municipales; se implantarán medidas para calmar el tráfico y, en su caso, restringir el tráfico privado en determinadas zonas de los centros urbanos y se firmarán acuerdos con agentes económicos y asociaciones de consumidores para la promoción de los equipamientos domésticos eficientes para el buen uso de la energía en los hogares, además de desarrollar campañas de concienciación sobre el uso eficiente de la energía y reservar el suelo para plantaciones arbóreas y arbustivas incrementando las zonas verdes y el esparcimiento.
En una segunda fase, que se llevará a cabo en los siguientes años, se elaborarán planes energéticos municipales que incorporen criterios de eficiencia energética, incluyendo la sustitución de tecnologías menos eficientes en instalaciones y servicios municipales; se realizarán auditorías energéticas y se certificarán edificios e instalaciones municipales; se aplicarán las Ordenanzas municipales sobre energías renovables y alumbrado público; se elaborará y aprobará un Plan de Movilidad Sostenible que incluya la adopción de medidas de restricción el uso del vehículo y fomento del transporte colectivo y medios alternativos al transporte motorizado; se promocionarán los medios de transporte que usen menos energía y contaminen menos; se fomentará la implantación de flotas de vehículos energéticamente eficientes y que usen energías limpias; se promocionará la arquitectura bioclimática en los nuevos desarrollos urbanos y en la rehabilitación de edificios existentes y se implantarán medidas destinadas a la racionalización del uso del suelo.
Tal y como indicó David Mingo, esta adhesión se realiza con unos objetivos claros, ‘aportar soluciones y medidas que se puedan implantar para frenar el cambio climático y sus efectos, trabajando también en la adaptación y en la promoción de la planificación ambiental estratégica como herramienta para aminorar la emisión de gases de efecto invernadero’.
Esta red centra sus actividades en diversas áreas. Así, desde el punto de vista del transporte, trabaja por elaborar planes de movilidad sostenibles, dirigidos a promover modos de transporte no contaminantes. En aspectos energéticos, desde la red se ejecutan acciones dirigidas a la reducción del consumo de energía final, a la mejora de la eficiencia y a la producción de energía con fuentes renovables. De igual modo se realizan actuaciones encaminadas a la reducción de las necesidades energéticas de los edificios y a la incorporación en ellos de energías renovables además de llevar a cabo propuestas dirigidas a reducir las necesidades de desplazamiento y energía de los ciudadanos, manteniendo ciudades compactas, multifuncionales y eficientes.
En función de estas premisas, la adhesión a esta red supone que en los dos primeros años se realicen actuaciones en varias áreas. Así, tal y como se pide desde la red se han aprobado ya ordenanzas sobre energía solar térmica en nuevas edificaciones y alumbrado público; se aplicarán medidas económicas y fiscales para favorecer la implantación de energías renovables y medios de transporte urbano menos contaminantes; se incluirán criterios de eficiencia energética en los concursos de compra de bienes y adjudicación de servicios municipales; se incorporarán de forma progresiva sistemas de eficiencia energética –la Concejalía ya ha elaborado el pliego energético y existe una adjudicación a una empresa- y energías renovables en los edificios y dependencias municipales; se implantarán medidas para calmar el tráfico y, en su caso, restringir el tráfico privado en determinadas zonas de los centros urbanos y se firmarán acuerdos con agentes económicos y asociaciones de consumidores para la promoción de los equipamientos domésticos eficientes para el buen uso de la energía en los hogares, además de desarrollar campañas de concienciación sobre el uso eficiente de la energía y reservar el suelo para plantaciones arbóreas y arbustivas incrementando las zonas verdes y el esparcimiento.
En una segunda fase, que se llevará a cabo en los siguientes años, se elaborarán planes energéticos municipales que incorporen criterios de eficiencia energética, incluyendo la sustitución de tecnologías menos eficientes en instalaciones y servicios municipales; se realizarán auditorías energéticas y se certificarán edificios e instalaciones municipales; se aplicarán las Ordenanzas municipales sobre energías renovables y alumbrado público; se elaborará y aprobará un Plan de Movilidad Sostenible que incluya la adopción de medidas de restricción el uso del vehículo y fomento del transporte colectivo y medios alternativos al transporte motorizado; se promocionarán los medios de transporte que usen menos energía y contaminen menos; se fomentará la implantación de flotas de vehículos energéticamente eficientes y que usen energías limpias; se promocionará la arquitectura bioclimática en los nuevos desarrollos urbanos y en la rehabilitación de edificios existentes y se implantarán medidas destinadas a la racionalización del uso del suelo.